Tom Morello aceptó por su cuenta la incorporación al Salón de la Fama del Rock and Roll de Rage Against the Machine anoche (3 de noviembre).

El grupo de Los Ángeles fue presentado en la ceremonia en Nueva York por Ice-T, pero los miembros de la banda Zack de la Rocha, Tim Commerford y Brad Wilk no asistieron.

En su discurso de inductancia, Ice-T dijo: “No puedes impresionarme con cosas normales. Tienes que impresionarme con cosas como demandar al Departamento de Estado de Estados Unidos por usar su música en la Bahía de Guantánamo para torturar. ¿Quién hace eso? Rage Against the Machine hace eso”.

“¿O qué tal 1993, cuando nos detuvimos en Lollapalooza desnudos con cinta adhesiva y protestamos contra el PRMC [Parents Music Resource Center]? ¿Quién hace eso? Rage Against the Machine hace eso. Respeto muchísimo a esta banda”.

Morello pronunció un discurso de motivación política, tras el cual se le vio entre bastidores sosteniendo su trofeo y una nota que decía: “Alto el fuego”.

El cantante abrió su discurso haciendo referencia a las fricciones dentro de la banda que habían surgido debido a su inducción. “Como la mayoría de las bandas, tenemos perspectivas diferentes sobre muchas cosas, incluido el ingreso al Rock Hall”, dijo.

“Mi perspectiva es que esta noche es una gran oportunidad para celebrar la música y la misión de la banda: celebrar al quinto miembro de la banda, que son los increíbles fans de Rage Against the Machine. La única razón por la que estamos aquí y la mejor manera de celebrar esta música es que ustedes continúen con esa misión y ese mensaje”.

«La lección que aprendo de los fans de Rage es que la música puede cambiar el mundo», continuó. “Diariamente escucho a fans que se han visto afectados por nuestra música y que a su vez han afectado al mundo de manera significativa. Organizadores, activistas, defensores públicos, profesores, los presidentes de Chile y Finlandia han pasado tiempo en nuestro mosh pit”.

“Cuando la música de protesta se hace bien, se puede escuchar cómo emerge un mundo nuevo en las canciones, atacando a los opresores de la época e insinuando que podría haber más en la vida de lo que nos fue entregado. ¿Puede la música cambiar el mundo? El objetivo es cambiar el mundo o, como mínimo, provocar un montón de problemas”.

“Pero a lo largo de la historia, aquellos que han cambiado el mundo de manera progresista, radical o incluso revolucionaria no tenían más dinero, poder, coraje, inteligencia o creatividad que cualquiera que estuviera mirando esta noche. El mundo ha cambiado gracias a la gente común y corriente que ya ha tenido suficiente y está dispuesta a defender un país y un planeta que sea más humano, pacífico y justo, y eso es lo que estoy aquí para celebrar esta noche”.